El acto fue convocado para las 9:30, donde se realizó un acto en frente a la sede en la que ocurrió la tragedia que dejó un saldo de 85 muertos y 300 heridos.
Bajo el lema “Justicia ausente, digamos presente”, se convocó un acto a las 9:30 para renovar el pedido de justicia a 29 años del atentado a la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), ocurrido un 18 de julio de 1994.
Al igual que ocurre en cada aniversario de la tragedia, la ceremonia comenzará con una sirena a las 9:53, hora en la que se produjo el ataque al edificio.
El hecho se produjo mediante el estallido de un coche-bomba ubicado frente a la sede de la institución, con frente a la calle Pasteur 633 en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Allí, alrededor de cinco años más tarde, se inauguró una nueva sede. Este ataque se convirtió en la mayor agresión contra sedes de la población judía más allá de las fronteras de Israel desde la finalización de la Segunda Guerra Mundial hasta entonces.
Previamente al atentado de la AMIA, se había producido otro similar contra el edificio de la Embajada de Israel con un saldo de 22 personas fallecidas.
El titular de la AMIA, Amos Linetzky, enfatizó en la lentitud de la justicia: “Cuando la justicia es lenta e ineficiente, la impunidad se acrecienta cada día que pasa y es inadmisible convivir con ella. Volveremos a estar presentes frente al lugar que se intentó destruir, para manifestar, públicamente, que no nos han vencido, y que exigir justicia y castigo a los culpables es un imperativo ético al que no renunciaremos”.
