El Día Internacional de los Cuidados y el Apoyo, celebrado el 29 de octubre, busca destacar la importancia de los cuidados en la sociedad, según la Asamblea General de Naciones Unidas. Este día, instaurado en 2023, tiene como objetivo sensibilizar sobre el papel crucial de los cuidados en la promoción de la igualdad de género y la sostenibilidad económica y social.
En América Latina y el Caribe, la necesidad de replantear las estrategias para reducir la pobreza y la desigualdad es urgente. Los cuidados, al liberar tiempo para que las mujeres se desarrollen en otros ámbitos, contribuyen a la construcción de sociedades más corresponsables y generan empleo decente, según datos de la CEPAL. En la región, por cada 100 hombres en hogares sin ingresos, hay 118 mujeres en la misma situación, lo que limita sus posibilidades de salir de la pobreza o de relaciones de violencia de género.
El trabajo doméstico y de cuidados no remunerado representa entre el 18,8% y el 26,8% del Producto Interno Bruto (PIB) en promedio en la región, según la CEPAL. Integrar los cuidados en el cálculo del PIB podría impulsar el crecimiento económico con empleos verdes, es decir, sostenibles y respetuosos con el medio ambiente.
El concepto de cuidados abarca actividades esenciales para el bienestar de las personas, muchas de las cuales son realizadas de manera no remunerada, principalmente por mujeres. Estas actividades incluyen desde cambiar la ropa de un bebé hasta atender a personas mayores o con discapacidades. Reconocer el valor económico y social de los cuidados es fundamental para avanzar hacia una sociedad más equitativa.
El reciente Foro Académico “Territorios de Cuidados”, organizado en la Ciudad de México por Colmex, Inmujeres, CEPAL y ONU Mujeres, reunió a expertos y activistas para discutir políticas integrales de cuidados. Se reafirmó la importancia de reconocer los cuidados como un derecho humano fundamental: el derecho a cuidar, a ser cuidado y al autocuidado.
En febrero, la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) abrió una consulta sobre los cuidados como derecho humano, y en junio, la Organización Internacional del Trabajo (OIT)reconoció el trabajo de cuidados como trabajo decente. Estos avances reflejan un creciente reconocimiento del valor de los cuidados en la agenda internacional.
Países como Uruguay, que en 2015 creó el Sistema Nacional Integrado de Cuidados, han liderado el camino en el reconocimiento legal de los cuidados. Otros países de la región, como Argentina, Chile, Costa Rica, Colombia, Cuba, Ecuador, México, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Venezuela, han avanzado en normativas o políticas de cuidados con diversos grados de desarrollo.
Sin embargo, persisten desafíos significativos en la implementación efectiva de estas políticas. Las trabajadoras del hogar, a menudo invisibilizadas y discriminadas, enfrentan barreras para acceder a la protección y seguridad social. La formalización y profesionalización del trabajo de cuidados sigue siendo un reto en muchos países.
Este Día Internacional de los Cuidados y el Apoyo subraya la necesidad de avanzar hacia una sociedad que reconozca, redistribuya y reduzca el trabajo de cuidados no remunerado, asegurando una remuneración digna y la representación de quienes cuidan. La inversión en políticas públicas que institucionalicen los cuidados a nivel nacional y local es crucial para lograr este objetivo.
